Ayer fue el cumpleaños de mi tío Gus, desde hace 12 años que está en Estados Unidos, allí estudió, se recibió y trabaja, tiene su vida armada con Elmer y Lalo, sus mascotas.
Desde enero del ’97 no lo veo pero ni con los 15000 kilómetros de distancia merma nuestro cariño, nuestro afecto mutuo.
Los primeros años de mi vida los viví con él y para mí es y siempre va a ser una de las personas más importantes, de esas con las que se puede contar siempre, siempre, siempre.
Hablamos horas y horas por teléfono y sus carcajadas siguen y su voz siguen siendo las mismas aunque atienda diciendo “hello?”, como dije antes, el cariño que nos tenemos también.
En mi alcoba hay un portarretrato rojo con su foto, en su departamento hay un portarretrato gemelo con mi foto...
Si los parientes se eligen yo lo elegiría con los ojos cerrados y sé que él entre todas sus sobrinas también me elegiría (porque soy la única)
Desde enero del ’97 no lo veo pero ni con los 15000 kilómetros de distancia merma nuestro cariño, nuestro afecto mutuo.
Los primeros años de mi vida los viví con él y para mí es y siempre va a ser una de las personas más importantes, de esas con las que se puede contar siempre, siempre, siempre.
Hablamos horas y horas por teléfono y sus carcajadas siguen y su voz siguen siendo las mismas aunque atienda diciendo “hello?”, como dije antes, el cariño que nos tenemos también.
En mi alcoba hay un portarretrato rojo con su foto, en su departamento hay un portarretrato gemelo con mi foto...
Si los parientes se eligen yo lo elegiría con los ojos cerrados y sé que él entre todas sus sobrinas también me elegiría (porque soy la única)
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